

Durante el Campeonato Pacific Rim 2024 en Cali, Colombia, una joven gimnasta de Bellevue, Washington, deslumbró al público y se coronó campeona all-around con solo 17 años. Su nombre: Jayla Hang, una de las grandes revelaciones del año. Ya en el Winter Cup de Louisville había dado señales de su nivel, quedando segunda en la general y cuarta en viga. Pero a pesar de esas actuaciones destacadas, su sueño más preciado se le escapó: competir en los U.S. Olympic Trials y luchar por un lugar en el equipo rumbo a París 2024.
Fue un golpe duro, pero también un punto de inflexión. Jayla no se detuvo: se reinventó. Y hoy, con una madurez notable, está de regreso. Más fuerte. Más determinada. Ya es considerada una recluta cinco estrellas y ocupa el puesto número 2 en la clase 2026 de la Universidad de Florida. El mundo de la gimnasia ha vuelto a poner los ojos sobre ella.
Con la mira puesta en el Campeonato Mundial de Gimnasia Artística 2025 que se celebrará en Yakarta en octubre, Hang se prepara para su gran regreso a la escena internacional. Y esta vez, viene con sed de revancha.
“No haber clasificado a los Trials definitivamente no era lo que esperaba”, confesó Jayla en una entrevista con Olympics.com. “Pero siento que para este año, 2025, estoy mucho más motivada y sé lo que necesito hacer para mejorar. La motivación es mucho más fuerte que el año pasado, porque no fue como esperaba que fuera”.
El cambio en su enfoque es evidente también para su entrenador, Cale Robinson, quien la guía desde 2019 en el club Pacific Reign Gymnastics. “A veces, cuando no obtienes lo que quieres, te das cuenta de cuánto lo querías realmente”, reflexionó. “Eso fue un catalizador para una nueva madurez. Ahora no se deja afectar por los malos días, no deja que se acumulen. Está tomando el control de su gimnasia”.
Con una estrategia medida y detallista, Jayla y su equipo han decidido construir sus rutinas con inteligencia: sin apresuramientos, y solo presentando lo que está listo para competir. Actualmente entrena el Amanar, uno de los saltos más difíciles del código, y aunque aún no se sabe si lo mostrará este año, ya lo ha insinuado en sus redes sociales.
Una cosa es segura: Jayla Hang no está esperando que las cosas mejoren. Está trabajando para que así sea. Y los resultados ya están empezando a llegar.