Simone Biles, la gimnasta más condecorada de la historia y una figura clave en el deporte mundial, ha revelado que todavía no ha tomado una decisión sobre si competirá en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. "Si voy a competir otra vez, no estoy tan segura. Pero estaré en los Juegos Olímpicos, ya sea en el tapiz o en las gradas", declaró la estrella estadounidense tras recibir el galardón a la Deportista del Año en la 25ª edición de los Premios Laureus, celebrados en Madrid este martes.

A sus 28 años, Biles confesó que continúa enfocada en su recuperación física y mental luego de su regreso triunfal en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde ganó tres medallas de oro y una de plata, después de una pausa de tres años. "He sacrificado mucho. Ahora estoy disfrutando del tiempo con mi familia, mis amigos y mi esposo. Antes de decidir si regreso al gimnasio y compito, quiero seguir valorando este tiempo", afirmó.

La atleta estadounidense fue clara respecto al esfuerzo que conlleva una nueva travesía olímpica. “Mucha gente cree que es un compromiso de un año, pero en realidad son los cuatro años que preceden a los Juegos. No es una decisión simple", enfatizó.

En una entrevista reciente con el diario francés L'Équipe, Biles compartió que tras su participación en París, su cuerpo colapsó físicamente y sufrió una enfermedad de 10 días. Incluso actividades cotidianas como correr con amigos le generaron molestias prolongadas. Estos episodios han reforzado su conciencia sobre las exigencias físicas a medida que pasa el tiempo.

Simone también se dio un momento para elogiar a su gran rival y amiga, la brasileña Rebeca Andrade, quien la superó en la final de suelo en París y se quedó con las medallas de plata en el all-around y salto. "Es increíble. Lo que ha logrado es inspirador. No puedo creer que haya regresado de tres lesiones graves. Amo competir con ella, me obliga a mejorar", expresó.

La salud mental continúa siendo un tema central en el discurso de Biles. Desde su retiro de la final all-around en Tokio 2020, ha sido una de las principales voces en visibilizar los desafíos emocionales de los atletas. "Mostrar vulnerabilidad es difícil. Ir a terapia todos los días, como aún lo hago, también lo es. Pero mi camino mental importa, y sé que no será una línea recta", reflexionó.

La obtención de su cuarto Premio Laureus —igualando el récord de Serena Williams— refuerza su lugar entre las leyendas del deporte. “Estoy en un punto de mi carrera donde tengo la humildad suficiente para saber cuándo decir basta”, dijo en enero. “Si vuelvo, sería por ambición. Pero también sería mi decisión. Hay sacrificios que hacer si decido regresar”.

Simone Biles no necesita más medallas para reafirmar su grandeza. Pero su historia aún está en desarrollo. Y aunque su presencia competitiva en Los Ángeles 2028 sigue en duda, su impacto en el deporte mundial continúa firme e inspirador.

Fuente: https://www.insidethegames.biz/

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