La Copa Alemania, organizada por el Club Manquehue en Santiago de Chile, celebró este año su 28ª edición, (30 años consecutivos solo interrumpido por la pandemia) consolidándose como uno de los eventos de gimnasia más relevantes de Sudamérica. El prestigio de esta competencia ha crecido a lo largo de los años, atrayendo a cientos de deportistas de la rama masculina, femenina y, más recientemente, también de gimnasia rítmica. Aunque la pandemia obligó a una pausa temporal, el evento ha resurgido con más fuerza que nunca.

En esta edición, participaron aproximadamente 1400 gimnastas solo en gimnasia artística, representando a clubes de Chile, Argentina, Brasil, Perú, Bolivia, y Uruguay. La diversidad de nacionalidades, junto con el alto nivel de competición, subraya la importancia internacional de este torneo.

El nivel competitivo fue impresionante, reflejando el gran trabajo realizado por los clubes asistentes. El evento, celebrado en un entorno de excelente infraestructura, con aparatos seguros y una organización impecable, ofrece una experiencia inigualable tanto para los atletas como para los espectadores. Cada participante, desde los más jóvenes hasta los experimentados, vivió la experiencia de cumplir sus objetivos en un ambiente deportivo de primer nivel.

El Club Manquehue, organizador del evento, ha sido un pilar fundamental para el desarrollo de la gimnasia en Chile. A lo largo de los años, ha visto surgir a grandes talentos, entre ellos Tomás González, el gimnasta más destacado del país, que inició su camino en este club hasta llegar a competir en los Juegos Olímpicos. Este tipo de eventos refuerzan el compromiso del club con la formación de atletas de talla mundial, quienes, además de competir, sueñan y viven la gimnasia con pasión.

Sin embargo, la Copa Alemania no se limita solo a la gimnasia artística. Una semana después de la competencia en esta disciplina, se celebra el evento de gimnasia rítmica, que reúne a clubes nacionales e internacionales, sumando aún más brillo a esta tradicional competición.

El éxito de la Copa Alemania no sería posible sin la colaboración de todos los involucrados: desde los jueces, quienes desempeñan un papel clave en el desarrollo de la competencia, hasta el personal de logística y técnicos que garantizan que todo funcione sin problemas. La coordinación detrás del evento es tan compleja como admirable, con un equipo que recibe y asiste a entrenadores y atletas, asegurando que cada detalle esté cubierto.

La Copa Alemania no es solo un torneo más en el calendario sudamericano; su relevancia radica en su capacidad para ofrecer una plataforma de alto nivel tanto a los gimnastas locales como a los internacionales. El ambiente vibrante, la excelente organización y la calidad de los participantes lo convierten en un evento único, inolvidable para todos los que tienen la oportunidad de competir y participar.